jueves, 12 de mayo de 2016
Actividad 4.1.
Las familias y el profesorado comparten el mismo objetivo, que es la educación
y la formación de los menores para promover su progreso personal exprimiéndolo de la
mejor manera posible. Para lograr este objetivo es fundamental mantener una relación
de colaboración con las familias en la que se comuniquen e informen compartiendo
intereses para conocer sus limitaciones y poder así aumentar sus posibilidades. Una
relación adecuada y favorable, da lugar a la mejora académica de los resultados del
alumnado y de esta manera, también el centro perfeccionará su calidad educativa.
Hernández Prados (2014) señala que son muchas las dificultades que presenta la
familia para poder implicarse educativamente, como pueden ser: las maratonianas
jornadas laborales que lleva a padres y madres a tener que ausentarse del núcleo
familiar, la carencia de un modelo de educación familiar, la desconfianza en la
educación como vía para un futuro mejor y las alternativas poco favorables que ofrece
el contexto, entre otras. Los jóvenes entran en una espiral en la que parecen heredar la
exclusión y vulnerabilidad de sus familias, y de la que es difícil salir.
Al mismo tiempo que los cambios sociales de las últimas décadas no hacen sino
dificultar el papel de los padres en la educación de los hijos (la incorporación de la
mujer al trabajo, las dificultades de la conciliación de la vida familiar y profesional, las
rupturas matrimoniales, los embarazos en adolescentes, etc.), estas mismas
problemáticas familiares y sociales han contribuido a redescubrir el valor de la
implicación de los padres en la educación y la necesidad de investigar respecto a su
eficacia y eficiencia, y ha llevado a repensar la participación educativa como una
competencia personal.
Todo esto hace que las relaciones familiares se vean influenciadas y transformen
el progreso de los hijos, porque no disponen de tanto tiempo para la proporcionarles la
afectividad y la dedicación que se merecen.
Referencias Bibliográficas:
Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. La participación de las familias en la
educación escolar. Recuperado el 10 de mayo de 2016 de:
http://www.eunec.eu/sites/www.eunec.eu/files/members/attachments/estudioparticipacioncee_digital_r.pdf
martes, 3 de mayo de 2016
Actividad 3.1: Encuesta
Rocío González Jorge y Beatriz Marcos Fuero
ANÁLISIS SOCIOLÓGICO EN EL CONTEXTO ESCOLAR
Hemos
escogido la encuesta ya que es una técnica de recogida de datos empleada
para un grupo determinado de personas. Suelen dar información menos detallada
pero en el caso de los alumnos de Educación Primaria, estos cuestionarios son
los menos aburridos.
Las
encuestas son el método de investigación cuantitativa más generalizado, pues
permiten que los fenómenos sociales puedan ser medidos y posteriormente
analizados mediante modelos matemáticos y técnicas estadísticas. Mediante las
encuestas se conocen las actitudes de las personas y sus intenciones. La gran
ventaja de las encuestas es que permiten a los investigadores recoger una gran
cantidad de datos comparables, para averiguar si existe alguna correlación
significativa entre las variables.
En
las encuestas suelen emplearse preguntas cerradas o/y abiertas en nuestro caso
aplicaremos ambos tipos de preguntas. Las respuestas cerradas son fáciles de
comparar y las respuestas abiertas dan mucha más información.
En
el ejercicio profesional podríamos aplicarlo para saber en qué mejorar y qué
rectificar en nuestra actuación docente, con estas encuentras conoceremos el
estado de satisfacción que se encuentran los alumnos, los padres, los
profesores, etc.
Está
claro que si queremos progresar en nuestro trabajo como profesores debemos
hacernos el mismo tipo de preguntas acerca de lo que ocurre en nuestras clases.
De alguna manera, las aulas son laboratorios en los que se desarrollan procesos
de enseñanza-aprendizaje de los que nosotros somos testigos privilegiados.
Reunir datos de cómo se desarrollan esos procesos es el primer paso para
mejorarlos.
Sería
recomendable pasar una encuesta al inicio de curso y otra a final de curso para
ver los progresos y si los resultados de las encuestas han sido favorables.
Las
encuestas que aplicaremos deben tener los siguientes elementos:
1. Preguntas
que posteriormente con sus resultados nos ayuden a mejorar.
2. Preguntas
claras y fáciles de responder.
3. Diversos
tipos de preguntas: abiertas y cerradas.
4. Un
orden: organización del curso, exposiciones del profesor, actitud de los
compañeros, trabajo individual en casa…
Las
encuestas que realizaríamos en clase serían de este tipo:
Con
estas encuestas sabremos las opiniones, preferencias, pronósticos y
experiencias de otras personas. La participación en una encuesta puede
despertar el interés personal de un niño en un proyecto y aumentar sus
interacciones con el tema, los compañeros de clase y otras personas en su
entorno. Una clase también puede usar encuestas para conseguir la participación
en un proyecto de padres de familia y otras personas de la comunidad.
BIBLIOGRAFÍA:
Barrado, C., Gallego, I. y Valero-García, M. (1999). Usemos las encuestas a los alumnos para mejorar nuestra docencia. Departament d’Arquitectura de Computadora, Universidad Politécnica de Cataluña. Recuperado el 30 de abril de 2016 de:
http://docencia.ac.upc.edu/jododac/CD10anys/2000/UPC-DAC-1999-70.pdf
Barrado, C., Gallego, I. y Valero-García, M. (1999). Usemos las encuestas a los alumnos para mejorar nuestra docencia. Departament d’Arquitectura de Computadora, Universidad Politécnica de Cataluña. Recuperado el 30 de abril de 2016 de:
http://docencia.ac.upc.edu/jododac/CD10anys/2000/UPC-DAC-1999-70.pdf
Cómo ayudar a niños a hacer encuestas. (2016). Illinoisearlylearning.org.
Recuperado
el 30 de abril de 2016 de: http://illinoisearlylearning.org/illinoispip/lesson-planning/surveys-sp.html
Giddens, A. (2010). Preguntas y respuesta a las
cuestiones sociológicas. En Sociología (6th ed.). Alianza Editorial.